¿Por qué orar por la unidad de los cristianos?
Alejandra María Sosa Elízaga**
Diálogos de Doña Teófila y Don Dudoso
Don Dudoso |
¡Hola comadrita, qué contenta la veo! |
Doña Teófila |
Sí, nos juntamos varios vecinos a rezar un Rosario por la unidad de los cristianos. Cada año del 18 al 25 de enero la Iglesia nos pide orar por esta intención. |
Don Dudoso |
Y ¿por qué quieren que todos los cristianos se unan? |
Doña Teófila |
A ver, compadrito, ¿no me dijo Ud. que se puso triste en Navidad porque quería reunir a toda su familia y no pudo porque unos están enojados con algunos, no se hablan o hablan mal de los otros? |
Don Dudoso |
Sí, sentí feo de ver que mis hermanos no se llevan bien. |
Doña Teófila |
¿Pues cómo cree que se siente Jesús al ver que haya tantos cristianos que lo siguen a Él pero no se entienden entre sí? Él fundó una sola Iglesia, y ahora resulta que hay demasiadas denominaciones cristianas por causa de hermanos que se han salido y han fundado su propia ‘iglesia’. Y eso no es lo que Jesús quería. Él le pidió a Su Padre: “que todos sean uno. Como Tú, Padre, en Mí y Yo en Ti, que ellos también sean uno en nosotros, para que el mundo crea...” (Jn 17,21). |
Don Dudoso |
Yo quiero a mi familia unida para verla al mismo tiempo, pero el Señor nos ve donde estemos, ¿para qué nos quiere a todos en la misma Iglesia? |
Doña Teófila |
Para que vivamos unidos en el amor, cumpliendo el mandamiento que nos dio, y para que nadie se pierda los dones y bendiciones que recibimos los católicos. |
Don Dudoso |
Pero los hermanos separados también tienen cosas buenas, sus reuniones son muy alegres, tienen predicadores que hablan bien, se ayudan entre ellos. |
Doña Teófila |
Sí, pero no están en la Iglesia que Cristo fundó. Y lo que tienen no se compara con lo nuestro. No tienen el consuelo de confesarse y sentir y recibir el perdón y la gracia de Dios; no aprovechan la amorosa intercesión de María y los santos; y, sobre todo, no reciben en la Eucaristía a Aquel que dijo: “el que come Mi Cuerpo y bebe Mi Sangre tiene vida eterna y Yo le resucitaré el último día” (Jn 6, 54). |
Don Dudoso |
Veo que perder todo eso es como conformarse comiendo tortas pudiendo disfrutar gratis un suculento banquete, da pena desperdiciarlo y sobre todo se va uno desnutriendo. |
Doña Teófila |
Por eso no podemos resignarnos a estar separados, sino luchar por volvernos a unir. |
Don Dudoso |
Pues me voy, a ver si junto un grupito para rezar por esa intención. |
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