Docenario de la infinita misericordia del Sagrado Corazón de Jesús

La devoción al Sagrado Corazón de Jesús y la devoción a la Divina Misericordia, son dos expresiones de una misma verdad cantada por el salmista: "la misericordia del Señor es eterna" (Sal 103, 17). Meditar en ella es sumergirse en un mar de consuelo y de esperanza como no hay otro. Buscando la manera de ordenar esta meditación, darle un sustento bíblico y emplearla como base para que cada uno la relacione con su propia vida y la aproveche para acercarse más al Señor, surgió este Docenario de la Infinita Misericordia del Sagrado Corazón de Jesús.

Escrito como una especie de rosario o coronilla (que, sin embargo, no requiere el uso de cuentas), plantea doce Misterios (de ahí su nombre) tomados de la Biblia, doce evidencias de la infinita misericordia del Señor que nos animan a entablar con Él un diálogo rico, personal e íntimo.

El Docenario de la Infinita Misericordia del Sagrado Corazón de Jesús se aprende fácilmente, se puede rezar en diez minutos, o durante toda una jornada o en un retiro, en cualquier lugar o momento, cumple una de las obras espirituales de misericordia y deja el alma llena de gozosa paz. 

Comentarios de Lectores

"En poco tiempo me he habituado a rezarlo y ya forma parte de mis diarias oraciones. Y he visto que de veras me quedo lleno de paz.". 
Eduardo Valle, México, D. F. 

"Orar con el Docenario me ha movido a experimentar gran cercanía y confianza en la infinita misericordia del Señor. Al buscar en la Biblia las citas sugeridas y con el apoyo de los ejemplos se facilita verdaderamente continuar un diálogo muy personal. De verdad doy gracias a Dios porque nos ayuda a profundizar en esta entrañable amistad viva con Él. Es un libro relativamente pequeño, pero al experimentarlo, su grandeza es incuestionable. Pido con todo mi corazón, que siga tocando otros corazones y este bendito Docenario dé verdaderamente abundantes frutos que tanto tanto necesitamos." 
Guadalupe Hernández, México, D. F. 

"A mi esposo y a mí nos ha gustado mucho ir rezando un Misterio cada día para dedicarle tiempo a meditarlo y lo hemos sentido muy provechoso. Enhorabuena. ". 
Gertrudis y Juan Felipe Domínguez, Cuernavaca, Mor.

¿Gusta dejar un comentario?